Wall Street: el dinero nunca duerme – la peli.

Hace ya tiempo que no hablo de cine. Y esto no puede ser. Así que hoy, queridos y queridas, toca.

Wall Street: el dinero nunca duerme.

Oliver Stone a la cabeza del proyecto.

Michael Douglas a la cabeza del reparto. Y Shia Labouef. Es majete Shia… sip.

¿Y qué cuenta?

Pues el personaje de Michael sale de la cárcel, después de cumplir la condena que le fue impuesta por las cositas que hacía en la primera peli. Y… escribe un libro. Y… tiene una hija. Y, fíjate que casualidades, es la novia de Shia Labouef. Y… pues que padre e hija no se llevan. Y… el mentor de Shia se suicida acosado por otros tiburones de Wall Street. Porque Shia trabaja en Wall Street. Y Shia quiere vengarse… ¿Y a qué no sabéis en quién piensa para saber como hacerlo? Pues en el odiado papá de su novia.

Y le va a conocer a espaldas de su chica.

Y se ayudan mutuamente.

Y… mejor no sigo que si no os cuento toda la peli.

Tenemos un malo malísimo: Josh Brolin. Este hombre estaba como un tren hace unos años, cuando nadie le daba trabajo… jajajajaja.

Pues… estos son los mimbres. Y los guionistas construyen una historia.

Y… ¿Cómo está la peli?  como es el edificio que construyen el director y los guionistas?

Pues… bueno, pasas el rato.

Le sobra un poco de adoctrinamiento descarado. Si es que… ya sabemos que los de Wall Street son tiburones que juegan con nuestro dinero, y los bancos igual. Pero los discursitos de diversos protagonistas, pues sobran. Me parece. Y sobran no porque no digan verdades, sino porque lo hacen de forma afectada, y poco eficaz. Suena a falso. Suena a panfleto incluido en el guión. Porque lo dicen además, personajes dudosos en cuanto a sus comportamientos.

¿Y que le falta?

Pues le faltan… personajes. Hay actores que interpretan, pero no creo que ninguno sepa quién es su personaje. Hombre, me imagino que Michael Douglas sabe quien es Gordo Gekko, que en la primera peli su personaje estaba bien definido. Pero los nuevos personajes… no creo que nadie les conozca, si sepa lo que sienten, ni lo que piensan… Y mucho menos  sus interpretes saben las razones por las que sus personajes actúan de una forma u otra en momentos determinados. La escena final… era el comentario general al salir del cine… nadie entendía el por qué del cambio de actitud de uno de los personajes. Pero eso pasaba en muchos momentos de la peli.

Eso sí, si no le das muchas vueltas, pues bueno… echas la tarde. Y Shia Labouef no está mal en gayumbos…. jijijijiji. Pero nada más… nop.

Y la chica, Carey Mulligam, también me gustó.

Venga, va, el tráiler.

Se me olvidaba. Salen también en la peli Frank Langella, Eli Wallach y  Susan Sarandon. Por ver a estos mostruos de la interpretación,  si que merece la pena pasar por alto lo dicho anteriormente. Y con cameo de Charlie Sheen. Y sale un verdadero jefazo de las finanzas de USA, haciendo de él mismo, por cierto.